Sophie Calle es una artista conceptual francesa nacida en 1953. A los 19 años decide realizar un viaje por Estados Unidos, intentando buscar una trayectoria a su vida. Cuando regresó a París siete años después se sintió una extraña, en el intento de recuperar su identidad comenzó a perseguir a extraños al azar fotografiándolos y tomando notas de sus movimientos.
Una noche se encontró en una fiesta con uno de sus perseguidos, y éste le contó que viajaría a Venecia al día siguiente. Sophie decidió seguirlo en su viaje durante catorce días, y el resultado fue "Suite Vénitienne", un relato fotográfico similar a una fotonovela o un diario fotográfico donde la anécdota era parte fundamental de la obra, tan importante como la documentación gráfica.
Entre los peculiares trabajos fotográficos de Sophie Calle cabe destacar "The Sleepers", una serie de fotografías donde se muestran personas desconocidas durmiendo en la cama de Sophie, a las que ella misma invitaba únicamente a dormir y a cambio de dejarse fotografiar, sin apenas intercambio de información. "The Shadow" fue otro proyecto en el que Sophie invertía la ecuación de sus perseguidores, haciendo que su madre contratara un detective privado para que la siguiera y fotografiara, simplemente para dejar constancia de su existencia, proyecto que repetiría veinte años después.
Obesión, locura, manía persecutoria, desequilibrio mental. Estos han sido algunos adjetivos con los que se han descrito algunas obras de Sophie Calle, cuando en mi opinión las obras artísticas no obedecen al orden del sentido común. ¿Quién no ha imaginado alguna vez que está siendo perseguido? ¿Quién no ha perseguido a alguien alguna vez sin tan siquiera darse cuenta?
Yo personalmente me siento en cierta parte identificada con las obsesiones de Sophie, aunque no tan extremista, y es que hay algo en las personas desconocidas que me inquieta y me atrae, y aun gustándome por el simple hecho de ser desconocidos, ojalá pudiera conocerlos más en ciertos aspectos de sus vidas.
" La existencia de los otros me inquieta: sus gustos, sus historias, su falta de historias, su vacío. En cualquier caso, no puedo evitarlo: cada vez que en la calle paso al lado de una ventana con las cortinas descorridas necesito echar un vistazo. ¿De dónde proviene esa curiosidad? Podría tratarse de una propensión narrativa, aunque tal vez se trate de una pulsión más primitiva, atávica incluso, o infantil. Buscar ahí dentro una sombra, un reflejo, descubrirse a uno mismo en los otros ya sea por contraste o por afinidad). O quizás todo lo contrario, entrever una existencia distinta, como si a través de ese resquicio cupiera lo excepcional, un secreto, un crimen, alguna anomalía, la posibilidad de escapar a la vulgar normalidad de los días que pasan. En todos los casos prevalece una sensación palpitante, la de estar transgrediendo algo (y esa sensación es placentera); es el temor a ser descubierta, a convertirme en una espía espiada."
Sophie Calle. "The Sleepers". 1979 |
Sophie Calle. "The Sleepers". 1979 |
No hay comentarios:
Publicar un comentario