jueves, 9 de mayo de 2013

SUSAN SONTAG. Una introducción al texto "Ante el dolor de los demás".




Nos encontramos ante la inevitabilidad y aceptación de la guerra, resignándonos a ella como algo imposible de abolir. Estamos visualmente acostumbrados a la guerra, y quizás también insensibilizados, incapaces de reaccionar a ella.

“¿Quienes son el “nosotros” al que se dirigen esas fotos conmocionantes?”

Las fotografías que muestran a personas muertas a causa de una guerra, dependiendo del contexto en el que sean expuestas y contextualizadas, crearán un efecto en nosotros u otro, siendo clave la identidad de quién es la persona muerta o afectada, aun siendo un completo desconocido, ya que se da por hecho que las personas mueren en las guerras defendiendo un ideal, aunque, por supuesto, no siempre sea así.

“- La violencia convierte en cosa a quien está sujeto a ella.- Simone Weil”

Durante mucho tiempo se intentó crear un rechazo a la guerra, una extremada sensibilización ante ella mediante la información visual, intentando hacer entender a la gente alejada de las atrocidades de la guerra, que ésta era terrible e insensata. Sin embargo, la interpretación de estas fotografías y esta información visual va estrictamente sujeta al contexto del que antes hablo, no solo de la visión del fotógrafo, sino también de su forma de mostrarlo, y por supuesto, de la censura a la que esa información haya sido sometida.




Esa es su guerra, ésta la fotografía. Y aquí, mi dolor.
 
James Nachtwey. Bosnia.

"La cámara lúcida". ROLAND BARTHES




- Reseña biográfica.
Roland Barthes (Cherbourg, 1915 - París, 1980) fue un importante ensayista, escritor y semiólogo francés, y uno de los principales representantes de la "nueva crítica" o crítica estructuralista.

En sus primero libros, Barthes analiza y critica cosas como el lenguaje, la escritura y la sociedad. En 1964, con la publicación de los "Ensayos críticos", comienza a sentar, de manera crítica, las bases de su semiología, es decir, de su teoría de los signos.

Ya en los años 70, Barthes adopta una actitud crítica frente a sus propias posiciones cientifistas de la etapa semiótica, y comienza a interrogarse sobre el sujeto de la obra, aflorando la importancia del "yo" narrador.

"La cámara lúcida" fue una de las últimas obras que Barthes escribió antes de morir atropellado.


- Resumen de la obra "La cámara lúcida".
En su libro “La cámara lúcida”, Barthes reflexiona sobre los rasgos que hacen a la fotografía única. Las fotografías no son más que signos, a los que es el espectador el que tiene que aportarle un significante mediante la reflexión.
Según Barthes la fotografía es objeto de la intención del fotógrafo, la del receptor y la de lo fotografiado.

Barthes teoriza sobre su posición como sujeto fotografiado, explicando que ante una cámara fotográfica nunca se reconoce, no es capaz de representar mediante su cuerpo la esencia de su personalidad.
“Mi vida privada no es más que esa zona del espacio y el tiempo en que no soy una imagen”.

Barthes determina que la fotografía es un arte poco seguro, debido al desorden de emociones que en él provoca, y también una aventura.

- Studium: está dado por la intención del fotógrafo, y depende de nuestra cultura. Dota a la imagen de funciones.
- Punctum: es aquello que es capaz de salir de la imagen y pincharte, lo que ocurre entre el espectador y una imagen, producto de la casualidad.

En opinión de Barthes, la fotografía ha nacido directamente de la pintura, y el pictorialismo no es más que una exageración de esa realidad, aunque la fotografía también está próxima al teatro, por su cercanía con la muerte.

“El fotógrafo debe desafiar las leyes de lo probable, de lo posible y de lo interesante”, para no que no se pierda la capacidad de sorprender de la fotografía. En relación a la fotografía de paisaje, Barthes determina que los lugares fotografiados no tienen que ser visitables, sino habitables.

La fotografía “unaria” es aquella que carece de punctum, cuando transforma la realidad sin desdoblarla, cuando es trivial y la composición es lo más importante. “La fotografía unaria grita pero no hiere”.

Por tanto, hay fotografías que tienen la capacidad e profundizar en nosotros y atravesarnos, y otras, que por el contrario, e independientemente de nuestro gusto hacia ella, no tienen esa capacidad. Estableciendo esto, podemos hablar de fotografías “to love” cuando el punctum nos atraviesa, y fotografías “to like” cuando es el studium lo que nos lleva a profundizar en la fotografía.



A la hora de hacer el ejercicio de tomar tres fotografías "que me gusten" y tres fotografías "que ame", he decidido tomarlas de los mismos fotógrafos, fotógrafos a los que admiro y respeto muchísimo, pero que dependiendo más de un factor mio personal, hay ciertas fotos que amo y otras que simplemente me gustan.

- Fotografías "to like"
Cartier-Bresson
Desiree Dolron

Sally Mann


- Fotografías "to love"
Cartier-Bresson
Desiree Dolron
Sally Mann



miércoles, 8 de mayo de 2013

Con un nivel desnivelado y un par de clavos.

Nunca antes me había planteado cómo montar una exposición, sin embargo ahora que he montado junto a mis compañeros un par de ellas, tengo dos cosas muy claras, en primer lugar que mis exposiciones futuras las voy a montar yo, y en segundo lugar que no podré hacerlo sola. Porque no es lo mismo montar una exposición con copias propias que con las de desconocidos, y no es que por el hecho de que no sean tuyas las vayas a tratar peor, pero sí es cierto que no se pone el mismo entusiasmo e interés. No cuentas con el factor de la ilusión.

La semana pasada inauguramos una exposición todos los alumnos de la Escuela de Arte de Murcia, en colaboración con el Archivo Regional, que básicamente nos dejó sus paredes para que colocáramos nuestras obras en ellas.
Aunque es una tarea bastante costosa, tanto mental como física, el montar una exposición fotográfica es un trabajo que yo considero necesario, pues ves las obras de otra manera, las catalogas de otra forma, y las analizas con una visión diferente a con la que sueles mirarlas.

También es imprescindible la ayuda, ya no solo a la hora de sujetar la fotografía mientras tú das martillazos, sino a la hora de dar su opinión, de poder debatir el lugar y la posición de cada pieza en los límites de una habitación cerrada.


Compartir los momentos es lo que hace que éstos sean importantes, aunque sean pocos y no duren mucho.

La escuela de Düsseldorf.



La escuela de Düsseldorf surgió en los años 60, a manos de Hila y Bernd Becher, un matrimonio alemán, ambos fotógrafos. Cuando decidieron fundar la escuela, no imaginaron que fuera a tener la repercusión que ha tenido en el ámbito fotográfico. Actualmente se considera como una revolución dentro de la fotografía, como el nacimiento de lo que podríamos considerar la fotografía contemporánea.

La obra resultante del matrimonio y sus discípulos, quienes fundaron los principios de la escuela, se caracterizó por la búsqueda del realismo, la distancia y la objetividad.

Hila y Bernd se conocen en el 1957 y comienzan a trabajar en la fotografía de arquitectura industrial, pero desde un curioso punto de vista documental, como si de un álbum familiar se tratase.

En los siguientes años, su obra va cobrando importancia en el panorama artístico internacional debido a su concepción de la fotografía, contando con una impecable simplicidad y objetividad, buscando siempre las semejanzas y diferencias entre objetos muy similares, como fueron depósitos de agua, almacenes de cereal, fábricas, etc. En estas fotografías estrictamente encuadradas no cabía lugar para elementos que distrajeran la atención.

Cabe destacar algunos de estos alumnos, como Candida Höfer, Axel Hütte, Thomas Ruff, Thomas Struth, Andreas Gursky, Petra Wunderlich o Jörg Sasse, a quienes se les conoce como la "clase Becher", que actualmente son fotógrafos reconocidos y admirados. Aunque todos ellos siguen los mismos patrones de la escuela de Düsseldorf, cada uno fue individualmente añadiendo modificaciones y características propias a sus fotografías, lo que completaría el estilo de la escuela.

A la hora de impartir enseñanza, la escuela potenciaba la propia individualidad de cada uno de sus alumnos, lo que actualmente conforma las diferencias entre los trabajos de cada uno de los autores, que aun siguiendo los mismos esquemas, muestran claras diferencias referentes al color, tratamiento y destino de las fotografías.

En cuanto a las similitudes entre los diferentes trabajos, cabe destacar el gusto por la sobriedad y los espacios amplios, la ausencia de distracciones en la fotografía, la documentación de espacios urbanos y arquitectónicos, siempre mostrados desde un punto de vista objetivo y evitando alteraciones externas.

Candida Höfer
Axel Hütte
Thomas Ruff
Thomas Struth
Andreas Gursky
Petra Wunderlich
Jörg Sasse



La fotografía que no hice. (Más de cuatro)

Como a la mayoría de fotógrafos o aficionados a ella, confieso que me da pánico pedirle a las personas que se presten a hacerle una foto, y no es solo el hecho de pedírselo, sino que en el caso de que se presten a ello preguntarán "¿Y cómo me pongo? ¿Qué hago?", y en ese momento soy yo quien no sé que decir.

Cuando voy por la calle y siento el impulso de fotografiar algo, siempre son situaciones espontaneas, que si pidiera permiso para fotografiar, dejarían de serlo y perderían el interés para mí.

Hace unos días iba por la calle con mi amiga Ana, periodista y musa, pasamos por un parque, y yo me quedé absorta mirando un banco. En ese banco había sentada una gran fotografía y quizás una gran conversación, era un hombre mayor al que le daba el sol del atardecer en la cara, tenía los pantalones atados a la cintura con un pedazo de cuerda, y sostenía en la cara una mirada de paz de las que no se ven todos los días, fija en algún lugar del vacío que nadie más podía ver. Esa fue la fotografía que no hice, pero Ana se dio cuenta de mi interés, y en un acto de rebeldía se acercó al hombre y con sus tablas de periodista le preguntó amablemente si yo podía hacerle una fotografía. Él era alemán, no habló mucho, dijo que sí y no sonrió. Me hizo la temida pregunta "¿Qué hago?", con los ojos rebosantes de tristeza, yo le dije que nada, que se quedara como estaba (aunque en un impulso de vergüenza se miró el pedazo de cuerda que le hacía de cinturón y se lo tapó con los brazos). Le pedí disculpas, y con toda la vergüenza y la prisa que podía cargar, le hice una foto. Solo una foto, y aunque ahora tengo algo parecido al recuerdo del momento, ojalá no la hubiera tenido que hacer, pues no refleja realmente mi visión de aquel momento, sino que la ensucia y distorsiona.


Para qué fotografiar. EVGEN BAVCAR.

Evgen Bavcar
LA FOTOGRAFÍA, ENTRE LA ILUSIÓN DE LO REAL Y LA MEMORIA.

"Mi concepto de fotografía se corresponde poco con las definiciones formuladas hasta ahora, y representa ante todo y esencialmente un acto mental".

WALTER BENJAMIN


- Reseña biográfica.
Walter Benjamin, (Berlín, 1892 - Port Bou, 1940). Fue un importante filósofo y crítico alemán, estudió en el Friedrich Wilhelm Gymnasium de Berlín y en la escuela de Turingia. Sus primeros ensayos sobre el lenguaje y su importancia, fueron publicados en la revista juvenil "Der Anfang".
En 1917 se casó con Dora Pollak, y junto a ella se marchó a Suiza.
Durante los siguientes años de su vida, y hasta el día de su muerte, Benjamin fue de un lado a otro, recorriendo Europa perseguido por el Nazismo.
No fue hasta los años 30 cuando comenzó a escribir sobre fotografía, dejando el legado que más tarde alimentaría la teoría de la fotografía tal y como la concebimos hoy en día.
Finalmente, y tras muchos años de huida, acabó con su vida en septiembre de 1940.

Juicios instantáneos. Cap 6. "Los genios de la fotografía".


Este capítulo de “Los genios de la fotografía” nos habla del mercado del arte, y de la situación en la que se encuentra la fotografía.
Actualmente existen demasiadas fotografías, aunque no por eso tienen menos calor económico, sino todo lo contrario.

Fotografías antiguas de autores como Robert Adams y William Klein se han convertido en reliquias muy valiosas, sobre todo aquellas fotografías llamadas “reservas”, que son copias que fueron sacadas en una fecha muy cercana a la que se hizo la foto.

También han resurgido ciertos autores que durante muchos años no fueron conscientes del valor de sus fotografías, como es el caso de Alex Soth o Seydou Keita.

Por otra parte, China, “el gigante dormido” que hasta hace poco tiempo usaba la fotografía solamente para propaganda y publicidad, está despertando fotográficamente. Wang Qingsong fotografía los problemas de la China moderna, pero en lugares que no pertenecen a China. Qingsong pretende hacer una gran obra para el mercado del arte, criticando en ella precisamente todo lo que supone ese mercado.

La gran diferencia entre la fotografía antigua y la moderna, es la concepción de arte que se tiene de la fotografía moderna, esto ocurrió gracias a muchas teorías y trabajos que introducían a la fotografía en el concepto de arte. Martin Parr, un fotógrafo que reconoce buscar la fama desde el principio y que ingresó en la agencia Magnum aun trabajando de una forma muy diferente, supuso un cambio para la propia agencia y para la concepción que el mundo entero tenía de la fotografía.

La fotografía evolucionó de esta forma gracias también a un grupo de fotógrafos que en los años 80 empezó a hacer la fotografía tal y como se pinta un cuadro. Cabe destacar a Jeff Wall, un autor cuyo medio es la fotografía, y descubre la importancia del tamaño de las imágenes. Andreas Gursky también hace fotografías a gran tamaño, sus tomas hablan de la globalización, presentando varias capas que se asemejan a las composiciones pictóricas. Gursky manipula sus fotografías en esa búsqueda de la perfecta composición, como tantos otros fotógrafos lo han hecho antes.

En el siglo XXI la fotografía es lo que los fotógrafos quieren que sea, mediante la manipulación y el control total de la toma, y disponiendo de muchos soportes y métodos de fotografiar muy diferentes.

Sally Mann usa la técnica del colodión fotografiando a su familia, aunque para ella la técnica no es importante, ya que considera que sus fotografías son modernas y lo que le gusta del colodión es la sensación que le produce. En el extremo opuesto a Sally Mann se encuentra Gregory Grewdson, que hace fotografías escenificando el momento que él desea mediante un gran esfuerzo cinematográfico, de hecho él se considera más un director de escena que un fotógrafo. De esta forma Grewdson crea mundos subjetivos irreconocibles, siendo estos una realidad aparente que nada tiene que ver con lo real.


Yo pienso que una fotografía debería de valer según su significado y su belleza. Basándome en mi gusto personal, y sin apenas un criterio fiable, me atrevo a subir a continuación las fotografías que para mi gusto deberían ser de las más caras del mundo.

Annie Leibovitz
Ésta es la última fotografía de John Lennon con vida, escasos días antes de morir asesinado. No es que me parezca una gran fotografía, sino que para mi muestra una gran carga de sentimientos.


Nan Goldin
Nan Goldin es para mi una de las "grandes", una de mis heroínas tras y frente la cámara. Esta fotografía para mi tiene un gran valor, quizás no debería ser una de las más caras, pero sí una de las más admiradas. Goldin se hizo este autorretrato tras recibir una paliza de su amante, para recordarse a sí misma ese "nunca más" que siempre se acaba olvidando.


Daguerre
Esta fotografía supone uno de los primeros daguerrotipos con conocimiento de causa, es decir, Daguerre, aun experimentando con largas exposiciones y con la luz, ya sabía que de esta toma saldría una fotografía con unas determinadas características. También es la primera fotografía en la que aparecen personas, en tiempos en los que la idea de hacer un retrato era inconcebible.

Apropiacionismo. "Al rededor del mundo".


El apropiacionismo es un movimiento artístico posmoderno que se basa en el uso de elementos pertenecientes a una obra de arte, que se usan para la creación de una nueva obra.

Realmente el apropiacionismo siempre ha existido de alguna manera, ya que en el arte siempre ha habido quienes inventaban nuevas técnicas y estilos, y quienes tomaban esas técnicas y estilos y las modificaban para crear otras diferentes. Aunque el termino “apropiacionismo” nació en los años 70 en Nueva York, basándose en la recontextualización de las obras de arte. Un claro ejemplo de apropiacionismo fue el urinario que expuso Marcel Duchamp como obra suya, Duchamp defendía su proceso creativo en el hecho de haber elegido ese urinario concreto y de mostrarlo en un contexto artístico, aunque ni era una obra única, ni era obra suya.

lunes, 6 de mayo de 2013

CATOPTROFOBIA. (La foto que no hice pero algún día haré)

Nunca me había planteado hacerme una serie de autorretratos. Quiero decir, hacer un proyecto fotográfico sobre mí misma, reflexionando sobre el contenido, el por qué y el para qué.